Y es que esta noche contra Denver Nuggets, que venía de una muy mala racha de 4 derrotas consecutivas como visitante, han vuelto a demostrar que es un equipo sin alma, sin fe, sin ganas... Y sin defensa, que es la faceta del juego sobre la que se pretendía construir esta franquicia, haciéndose con jugadores como Michael-Kidd Gilchrist en este último draft o Bismack Biyombo en el penúltimo.
El partido comenzó muy igualado, con unos Bobcats capaces de anotar en ataque estático, muchas veces metiéndose hasta la cocina ante la nula intensidad defensiva de los Nuggets.
Los de Colorado, por su parte, tenían problemas para atacar 5 contra 5, pero cuando podían correr eran letales, y en caso de atasco recurrían al tiro exterior con bastante acierto.
Así llegaríamos al final de cuarto con 29-31 para los Nuggets, con un estelar Andre Iguodala, (7 puntos y 6 asistencias).
El segundo episodio continuaría de un modo similar, incluso con algunos problemas en ataque para los Nuggets que unidos a que Kidd Gilchrist y Gerald Henderson se iban ya a dobles figuras en anotación, pusieron a los Bobcats por delante, lo que no duraría demasiado, ya que en los últimos 4 minutos de cuarto, los Nuggets realizaron un par de defensas buenas, que le fueron suficiente para irse al descanso con una pequeña ventaja en el marcador (54-60).
Javale McGee la hunde ante Bismack Biyombo
Tras la reanudación no cambió nada en el partido, continuaban las defensas pasivas y los ataques fluidos, lo que ayudaba a aumentar la diferencia a favor de los visitantes.
Por suerte, una pequeña caraja de un par de minutos de los Nuggets y una gran actuación del Rookie suplente de los Bobcats, Jeff Taylor, que llegaría al final del cuarto con 15 puntos (para mí el más destacado de Bobcats después de Kemba Walker, aunque sólo sea por actitud), dejaría la diferencia en sólo 9 puntos (74-83).
Pero no hubo último cuarto, los Bobcats se desentendieron completamente del partido y dejaron campar a sus anchas a los Nuggets, que se llevaron una fácil victoria para colorado (99-113).
Sólo Kemba Walker parecía tener un poco de orgullo, y a base de robos de balón y grandes jugadas ofensivas individuales, consiguió que el resultado no fuese peor.
Lamentable el pasotismo defensivo de los Bobcats en este cuarto, destacando sobre todo un muy apático Byron Mullens.
Por parte de los Nuggets destacaron con 20 puntos Ty Lawson (pese a su mala serie de 6 de 15 en tiros), y André iguadala (13 puntos y 10 asistencias), mientras que Kemba Walker (24 puntos, 5 asistencias) y Jeff Taylor (18 puntos) fueron los que más aportaron para los locales.
Los Nuggets (35-22) se encuentran quintos en la conferencia oeste y en tierra de nadie, lo que presumiblemente conlleve un muy duro cruce en playoff para un equipo sin jugadores decisivos para momentos calientes, mientras que los Bobcats (13-43) ya piensan en hacer progresar a sus jóvenes para la próxima temporada.
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